Mi madre es asidua a la crema antiarrugas Revitalift de L´Oreal, y en esta ocasión ha adquirido un pack que incluye la crema y este neceser.
El neceser me lo ha regalado y me va a venir de perlas. Es de tela y bastante mono con esos colores y el dibujo a doble cara del ilustrador Jordi Labanda. El dibujo de la chica parisina oliendo flores con la torre Eiffel de fondo es muy estiloso, 100% "chic francés". Y es grande y cabrán muchas cosas: para casa o viajes va a ir genial.
El pack cuesta 11.95 euros en perfumerías, aunque no sé si ella lo habrá pillado más barato en alguna oferta.
De todos modos yo jamás pagaría 12 euros -ni 10- por una crema. Más de 5, para ser exacta. Y quien quiera ser timada pagando 30, 50, 100 o 200 euros por una crema "milagrosa", desde luego está en su derecho.
En mi experiencia, si no tienes problemas cutáneos que requieran de tratamientos específicos, con cremas económicas va una sobrada. Por no mencionar cosas naturales como mascarillas caseras o el aceite de coco, que te lo pones por la noche y despiertas con cutis de bebé. Soy muy fan de las cremas faciales de LIDL: 3 euros y todas me van de lujo, y ahora mismo alterno la crema Nivea Soft (1.50 euros) y la crema Bella Aurora (5 euros). Mi exfoliante de Organic Shop costó 2 euros, mi mascarilla de Yves Rocher 3.25, mis leches limpiadoras de LIDL y Deliplus un euro y poco... y así todo. Y no es por fardar, pero pese a usar productos faciales tan baratos, si me quejara de piel sería para sacudirme a tortazos. Como siempre digo: las cremas son una ayuda muy secundaria y lo primordial para tener un cutis magnífico es que te haya tocado una buena genética y seguir ciertos hábitos: no fumar, huir del sol, descansar y cero estrés, comer bien, mucha agua, deporte, etc.
