A fecha de hoy, mi marca capilar favorita en el segmento profesional sería Revlon Professional, y después le seguiría TIGI probablemente. Eso sí: mi champú favorito de todos los tiempos es el Tsubaki de Shiseido, y tengo otro japonés sin estrenar.
De TIGI he tenido tres champús y los tres me parecen fabulosos. Comenté el hidratante Bed Head Urban Antidotes, y tengo pendiente reseñar el champú para pelo teñido Colour Goddess. Hoy le toca al Catwalk de avena y miel.
Lo compré porque lo pusieron de oferta a 10 euros. Un champú profesional de peluquería y casi un litro por ese precio, ni te lo piensas. Echas cuentas y sale más barato que pillarlo de supermercado: con esa cantidad dura meses, y como lo alternes con otros champús, más de un año como me duró a mí.
La línea Catwalk es reparadora, nutritiva, alisadora y suavizante. Ninguna sorpresa en mi pelo normal y sin sequedad ni problemas: lo deja fenomenal. TIGI no defrauda, se nota la calidad profesional. A mi pelo ultra facilón y cero exigente le van genial tanto productos profesionales o caros como los de supermercado de 3 euros, pero cuando uso marcas como TIGI debo admitir que lo noto. Luego en lo profesional también encuentras decepciones sonadas como por ejemplo la marca Kerastase (las cuatro cosas que he tenido me parecieron una m*****; ahora mismo tengo un sérum y estoy deseando acabarlo).
Pero lo que más me alucina de este champú es el olor, huele a galleta que te desmayas. Los champús de TIGI huelen que es una fantasía: el hidratante olía como a eucalipto, éste a galleta, y el de pelo teñido huele a caramelo toffee que flipas. El último incluso me "agobia" por lo fortísimo que es y por eso creo que prefiero el de galleta, es más suave. Que sigue siendo intenso, pero nada que ver con la bestialidad del otro. De hecho, el de toffee era el champú que estaba usando actualmente pero he decidido aplazarlo para otoño / invierno ya que su fragancia me pega más con ese clima. Ahora con este calorazo prefiero champús con aromas más frescos y ligeros.
Costó 10.30 euros en Amazon el botellón de 750 ml. Y lo que decía: no merece la pena comprar champús de supermercado, cuando encuentras estos champús profesionales a precios ridículos y en envases gigantes que duran meses.
NOTA: 10 / 10
