Recientemente he descubierto la marca polaca Cameleo: me he estrenado con un tinte negro azulado y con esta barrita. Hay más tonos, la mía es la negra.
Hair & Root Touch-Up tiene el mismo cometido que los famosos sprays Magic Retouch de L´Oreal y Root Retoucher de Schwarzkopf: retocar cuando ya nos han salido raíz y canas, disimulándolas antes de que volvamos a teñir.
Yo empiezo a utilizar estos productos de retoque a partir de los 18-20 días de haberme teñido. Es cuando empiezo a verme alguna canita, pero desde que descubrí esos sprays ahora hago el mes completo sin que se me vean. Esos pocos días las maquillo con el spray, y luego ya me tiño y no vuelvo a retocar hasta final de mes. Con la raíz nunca tengo problema pues de mi castaño oscuro al negro teñido no se aprecia diferencia a simple vista. Y canas me salen cuatro contadas y muy cortitas: lo malo es que como me tiño de negro, cuando aparecen se ven bastante.
Para más detalles, consultar mis reseñas del Magic Retouch y del Root Retoucher.
Hair & Root Touch-Up hace lo mismo -maquillar de negro mis canas-. Cambia el formato: el stick es cómodo, aunque tardo mucho menos con los sprays. Con la barra tienes que ir cana por cana y presionando sobre el pelo para que cada una quede bien pintada; no como el spray que con una única pulsación me deja negra toda la raíz / canas. Lo bueno es que por su tamaño es muy práctica para retoques de emergencia o llevarla por ahí, no como los botes de los sprays.
Otro negativo es que las raíces quedan como plastosas: no olvidemos que posee textura de barra de labios, de crema, por lo que la zona donde la apliquemos quedará aplastada y pringosilla. Con el spray de L´Oreal era al revés y la raíz me quedaba acartonada, "seca". El de Schwarzkopf es el mejor en eso y deja el cabello suave y suelto, como si no hubiéramos aplicado nada.
A efectos visuales queda igual que los sprays: cero canas y mi cabello sigue luciendo bien negro esos días previos a volver a teñirme. Pero reitero que tardo más rato, y donde la apliquemos el pelo queda pastoso, lamido (solo al tacto: a simple vista luce bien). También puede manchar los dedos. Luego el lavado con champú elimina el producto a la perfección.
¿Repetiré? para nada, de hecho estoy deseando volver al spray. Los dos sprays cuestan entre 5 y 7 euros y la barrita 1.50, pero no merece la pena el ahorro. Además, a mí un spray de esos me dura un año o más.
Era muy buena la idea y es un formato pequeñito y cómodo, pero el producto es bastante engorroso.
Contiene 4.6 gramos y costó 1.50 euros en Primor.
NOTA: 4.5 / 10
