Otro evento en el que Salma Hayek me dejó flipando: es impresionante el partidazo que se saca (y le sacan) a esta mujer.
Lo que no me convence de ella -aparte de ser tan bajita- es que sus senos por dentro lleven el mismo material que se utiliza para sellar puertas y ventanas. Las tetas operadas me causan rechazo absoluto, no lo puedo evitar. Donde se ponga un pecho grande natural que se quite todo. Y si no, prefiero mil veces un pecho normal o pequeño que cualquiera grande de goma.
Pero me encanta igual, y tiene mérito que en estos eventos Salma siempre consigue eclipsar a todas. Es un gran ejemplo de que puedes lucir increíble aunque no tengas un físico 10 / 10. Y vamos, menudo aspecto con 56 años.
En esta ocasión de nuevo lució ESPECTACULAR con ese vestidazo de tul, vinilo y perlas (original combinación). De cara guapísima como siempre y divinos el recogido, el maquillaje y los adornos de rosas que llevaba en el pelo.
Siempre lo he pensado: el color por excelencia para las morenazas es el ROJO. Aunque te pongas un simple jersey anchito, si es rojo deslumbras. El combo pelo negro + piel morena + ojos oscuros + labios rojos + ropa roja = de caerse al suelo. Y Salma aquí fue la viva prueba.
