Elizabeth Taylor es mi actriz favorita del cine clásico y "Cleopatra" (1963) la he visto miles de veces. Pues hace nada y coincidiendo con que volví a verla, he sabido que en esta película se maquilló ella. ¡¡No tenía ni idea!!.
Según leí, el maquillador Alberto de Rossi sufrió un accidente y tuvo que ser operado de la espalda, no pudiendo volver al set. Sucedió antes de comenzar el rodaje y entonces Elizabeth decidió maquillarse ella misma (como bien leí en un artículo, esto debió ser lo único que se ahorraron en esta película). Al maquillador le había dado tiempo a diseñar los bocetos y colores de los maquillajes, así que Liz, que había observado y estudiado la técnica de Rossi, cogió dichos bocetos y fue recreándolos.
¡Ya podrían haberle dado un Oscar a Elizabeth como maquilladora, porque anda que no se le daba bien!. Y no fue la única película en la que se maquilló: por supuesto se contrataban maquilladores profesionales, pero en esa época era habitual que las actrices se maquillaran ellas mismas. Y ella lo hacía tanto en pelis como para eventos o fiestas; no en vano Liz era una apasionada del maquillaje y fuera de las películas se pasaba horas practicando, buscando especialmente destacar esos mega-ojazos. Hay muchas fotos suyas maquillándose en rodajes, incluyendo "Cleopatra".
Tan orgullosa (con razón) estaba Liz de sus maquillajes en esta película, que a menudo terminaba un rodaje y no se desmaquillaba para así lucirlo el resto de la jornada -como en las citas con Richard Burton-. Y no fue la única en llevar ojos egipcios de manera cotidiana, pues recordemos que su maquillaje como Cleopatra es icono del cine, causó furor y en los años 60 fue copiado por legiones de mujeres que entre otras cosas también se teñían el pelo de negro o usaban pelucas, todo para emular el impresionante e inolvidable look de Elizabeth Taylor como la legendaria reina de Egipto.
Lo dicho: si ya me encantaban ambas, Elizabeth y "Cleopatra", después de saber esto pues ni te cuento.