lunes, 5 de septiembre de 2016

Lápiz de cejas - Yves Rocher


Este lápiz de Yves Rocher era el que utilizaba cuando me teñía el cabello en tonos claros y para armonizar tenía que decolorar el negro de mis cejas y luego maquillarlas en color castaño. Mi tono fue el "Brun" (foto superior y abajo a la derecha): idóneo para retocar cejas en marrón oscuro, aunque dependiendo de la fuerza del trazo podemos conseguir un castaño suave.

Formulado con manteca de karité, es preciso y duro pero suave al mismo tiempo; consiguiendo un trazo perfecto, homogéneo y natural. En su extremo incluye un cepillo que permite alisar y disciplinar las cejas, así como difuminar el color del lápiz.

Pinta y queda muy bien, pero tiene un fallo gordísimo: se va con mirarlo, a diferencia de otros lápices de cejas que me duran intactos todo el día. El de Yves Rocher tiene una duración de auténtica pena.

Contiene 1 gramo que cunde muchísimo: lo tengo desde hace 6-7 años mínimo, y utilizándolo a diario durante los períodos en los que he llevado el cabello claro, todavía me quedan cuatro dedos de lápiz. Abandonado en la actualidad debido a que ya no llevo el pelo ni las cejas aclaradas, pero corroboro que pinta tan bien como el primer día.

Su precio es de 9.50 euros pero en Yves Rocher siempre tienen descuentos en los productos y puede conseguirse a mitad de precio: a mí me costó 4 euros y pico. Pese a tan bajo precio no repetiría con él, debido a lo mencionado de la duración.

NOTA: 3 / 10