- Coloretes en crema Miracle Touch (Max Factor): tuve uno hace mil años, cuando los lanzaron creo, y me costó 8 euros aproximadamente. En esta ocasión he comprado dos ¡¡¡liquidados a 1 euro cada uno!!!. Increíble. Es un colorete en crema excelente, de los mejores coloretes en crema que he usado. Me encantan en esta textura y lo cómodo y rápido que resulta aplicarlos con los dedos y poder prescindir de brocha, a diferencia de los coloretes en polvo. Pìllé los tonos Soft Candy (rojo) y Soft Cardinal (rosa) y ambos sientan de maravilla. También tenían el Soft Murano y el Soft Copper.
- Brillo de labios MNY My Gloss, tono 589 (Maybelline). Parece morado pero queda prácticamente transparente. Lo compré por bonito y por ataque nostálgico: uno de mis primeros labiales fue un brillo de la marca Tahe que también era este formato de tubito, y me hacía ilusión volver a tener un gloss con ese envase. Guardo también muy buen recuerdo de unos preciosos glosses en tubo de Essence que olían a tarta de queso, brownie, mango, cerezas, pastel de manzana... También liquidado a 1 euro.
lunes, 31 de mayo de 2021
Compras de maquillaje en mayo
viernes, 28 de mayo de 2021
Máscara de pestañas Big Ego - Tarte
Esta es mi máscara de pestañas actual, tras haber terminado la extraordinaria Damn Girl de Too Faced y la también buenísima False Lash Effect de Max Factor.
Tenía por estrenar un envase pequeño de la They´re Real de Benefit pero la voy a regalar, porque pese a ser una máscara icónica y excelente, mira que no es waterproof pero es increíble lo que se agarra a las pestañas y me cuesta muchísimo desmaquillarla: me tiraba mil horas frotando y aun así siempre me quedaban restos, no lo soportaba, qué rollazo. Yo quiero máscaras que apenas pase el disco y la limpiadora se eliminen rápidamente y sin dificultad, no el suplicio de la They´re. Por ese motivo no volveré a utilizarla. De Benefit prefiero infinitamente la Roller Lash.
La mini-máscara Big Ego de Tarte me vino de regalo en el set Party on the Go, que incluía la monísima paletita de sombras Tartelette Party, y esta máscara. La paleta ya la comenté.
Respecto a la máscara, pues igual de excepcional que dicha paleta y que todos los productos que tengo de Tarte: menudo descubrimiento de marca, tremenda su calidad.
Big Ego es una máscara voluminizadora que ofrece color negro muy intenso y larga duración. Su cepillo especial con cerdas trenzadas de doble fibra envuelve cada pestaña y le descarga pigmento máximo, proporcionando un volumen espectacular. No dan más datos, y es que lo que más publicita de ella la marca, como muchas otras en la actualidad con productos de maquillaje, es que es vegggaaaaaana. Pues bien.
El resultado: IMPRESIONANTE. Como siempre digo cuando comento una máscara, con mis pestañas es harto difícil que alguna no me deje pestañones, y Big Ego se suma a la costumbre. Las pestañas quedan gigantescas, volumen a tope, preciosas, rollo postizas y llamativas pero al mismo tiempo se ven naturales y sin resultado artificial (el horrible efecto "patas de araña"). Aparte de la largura y el espesor, naturalmente ya las tengo rizadas -nunca he usado rizador de pestañas y tampoco pestañas postizas- y muy negras, y máscaras tan buenas como ésta no hacen más que potenciar el efecto. Por no mencionar que se limpia rápido, no como la tortura de la They´re Real. Ah, y me encanta su envase rosa.
El tamaño normal de 7 ml cuesta 28 euros, y el de 4.5 ml, 15. Yo tengo el más pequeño de solo 2 ml y aun así creo que va a durar largo tiempo, debido a que me maquillo con cuentagotas. El pack con la paleta de sombras y la mini-máscara me costó rebajado en Sephora 17 euros, así que fenomenal.
Fabulosa, podría ser opción para compra futura. Aunque en máscaras de alta gama creo que me sigo quedando con la Damn Girl de Too Faced o la Roller Lash de Benefit (también recuerdo alucinantes la Velvet Noir de Marc Jacobs o la Diorshow de Dior etc etc), pero ésta no tiene absolutamente nada que envidiarles. Y de todos modos, al final siempre termino comprando máscaras baratas, ya que debido a mis pestañas, las de marcas como Maybelline, Bourjois, Rimmel London, L´Oreal o Max Factor me dan el mismo resultado que las de 30 euros. Las últimas las utilizo, pero siempre son envases pequeños de esos que regalan con revistas o en Sephora al comprar productos, o como ésta de Tarte que vino en un pack. Tengo otra máscara de Tarte por estrenar, la Maneater, que me vino con el maravilloso cofre Gift & Glam.
Pero vamos, que yo gastarme 30 euros en una máscara que me durará un año o menos, ni en sueños. Mi tope son 10 euros. No tengo problema en pagar 40 por un colorete o 65 por una paleta de sombras, pero claro, son productos que igual me duran 10 años -mínimo-.
NOTA: 10 / 10
EDITO: la he terminado en octubre de 2022, así que ha durado un año y medio (o más) ¡y eso que era tamaño enano!.
miércoles, 26 de mayo de 2021
Gel de ducha nutritivo - Lactovit
El clásico gel de ducha Lactovit refuerza la piel y le proporciona nutrición, hidratación y suavidad gracias a sus vitaminas, calcio y proteínas y activos 100% naturales de la leche. Se hizo muy famoso cuando se lanzó en 1999, convirtiéndose en el gel de ducha lácteo por excelencia. Yo lo tuve por aquel entonces y me gustaba bastante. Por pura nostalgia lo he vuelto a comprar.
Chasco: posee un olor muy corriente, a gel de ducha genérico. Lo recordaba mucho mejor. Supongo que me he malacostumbrado por llevar tantísimo tiempo con los geles de Tulipán Negro y sus aromas alucinantes a vainilla y macadamia, golosinas, fresas con nata, chocolate praliné, nube de algodón, violeta dulce, coco, etc. O el de argán de Natural Honey, o el de vainilla de Deliplus... Y claro: ahora huelo un gel de ducha no goloso / dulzón y se me hacen sosos, como me ha pasado con el Lactovit.
Y es que SOSO es la palabra que mejor describe mi actual experiencia con este gel. De adolescente me gustaba mucho pero ahora pfffff... uno más entre mil. Limpia bien y no es malo, como gel de ducha realiza su función perfectamente. Pero no lo volvería a comprar, pudiendo tener en su lugar cualquiera de los geles mencionados.
Quizá fue error mío de percepción por haber pasado tantos años, o tal vez la fórmula del gel haya cambiado y empeorado, pues ya digo que lo recordaba mejor en todo (olor, cremosidad), y lo dicho: muy normalito. Lo alterno con el gel Sweet Violeta de Tulipán Negro, y menuda diferencia entre ambos.
Lo que más me gusta es su envase con forma de botella de leche. No sé qué me pasa con las botellas de leche que me encantan estéticamente, incluyendo los cosméticos con esa forma. El gel Lactovit, los champús y acondicionadores Fructis Hair Food... Igual es que las asocio con lo retro o con mi amadísimo cine clásico, a saber.
Contiene 600 ml (también hay tamaño de 900 ml) y costó 2.20 euros en Primor.
NOTA: 5 / 10
No me ha entusiasmado el gel de ducha, pero ya comentaré mi nueva crema facial que es de Lactovit y esa sí me parece una P-A-S-A-D-A.
lunes, 24 de mayo de 2021
Pendientes Anhk egipcio (Aliexpress)
Llevaba siglos sin comprar en Aliexpress, hasta que a principios de mes cayeron una preciosísima figura de Wonder Woman (todavía más bonita en persona que en foto) y estos pendientes (ídem).
Por culpa del juegazo Assassin´s Creed Origins llevo tiempo con pasión renovada y desmesurada hacia el Antiguo Egipto, y al igual que dos libros sobre Cleopatra y Anjesenamón, estos pendientes también se vinieron a casa. Y ahora que estoy con el Assassin´s Creed Valhalla y revisionando "Vikingos" se repite la historia pero con los nórdicos; no en vano pillé en Amazon cuerno vikingo para beber ;)
Los tienen en dorado y plateado, elegí los primeros. 75 céntimos + envío = total 1.55 euros. Tiradísimos de precio, y como la Wonder Woman, desde China tardaron poco más de dos semanas.
Me encantan, son bien chulos, pequeñitos y quedan finísimos y elegantes. Si os gustan, ni os lo penséis.
NOTA: 10 / 10
viernes, 21 de mayo de 2021
Champú, acondicionador y mascarilla Hair Food (aloe vera) - Garnier
- El champú es gel transparente y limpia bien. Huele muy agradable y contiene 350 ml.
- El acondicionador es el producto que más me gusta de esta gama. Muy cremoso, me recuerda como a yogur líquido y deja el pelo genial, mejor que la mascarilla. 350 ml.
- La mascarilla es igual que el anterior, solo que todavía más ligera. A mí me hidrata / nutre más el acondicionador (cosa rarísima). Esta mascarilla yo no la usaría en pelo seco, decolorado o destrozado porque sería como no echarse nada. Es ligerísima y ya digo que parece más un acondicionador normalito que una mascarilla. Yo porque compré el pack con las tres cosas, pero en caso de duda, elegid el acondicionador sin dudarlo. 390 ml.
Lo que decía: me parecen productos correctos pero como mil más que hay en el mercado, básicos, sencillos y 100% para pelo NORMAL, cero estropeado y sin sequedad ni problemas. En este caso funcionan bien y dejan el cabello suave y bonito (aunque sigo prefiriendo otros Hair Food, y cuando la termine no repetiré con esta gama). Y lo dicho: si tenéis el pelo maltratado o seco, elegid productos más intensivos.
El champú y el acondicionador sueltos rondan los 4.50 euros, y 5 la mascarilla. Yo compré en Primor el pack con los tres productos a 8.99 euros. Salen a cuenta estos estuches, pues te ahorras un producto. Aunque en el caso concreto de Hair Food aloe vera, repito que mejor optar por el acondicionador y prescindir de la mascarilla.
NOTA: 6.5 / 10
martes, 18 de mayo de 2021
Clip de perlas Oh My Hair - You Are The Princess
sábado, 15 de mayo de 2021
Maquillaje iluminador Photoready Skinlights - Revlon
martes, 11 de mayo de 2021
Esmalte Pop Nails Les Metalliques "Argent Irisé" - Miss Cop
viernes, 7 de mayo de 2021
Set de maquillaje Cinnamon Bear - Too Faced
En enero adquirí este coqueto set de Too Faced. Fue una edición especial para Navidad y ya no se encuentra a la venta. Tuve suerte, porque pasé semanas dudando si comprarlo y cuando me decidí aún quedaban unidades. De milagro, porque al final, de casi 50 euros lo rebajaron a 20!!!.
Por 20 euros y siendo Too Faced, este set fue REGALADO. Y menos mal que finalmente lo compré, porque menuda preciosidad.
Incluye un neceser, una paleta con sombras de ojos y colorete, y un labial Melted Matte en el rojo "Cinnamon Bear".
El labial lo comentaré aparte, pero ya adelanto que es ESPECTACULAR y probablemente el rojo de labios más chulo que he tenido. Queda IMPRESIONANTE, y ya no hablemos de la calidad y duración: se queda fijo fijo y resulta alucinante por ejemplo estar bebiendo de un vaso y no dejar nada de mancha roja en el cristal. Y no es tamaño pequeño, sino que es el tamaño grande normal de los Melted Matte, 7 ml. Teniendo en cuenta que cada uno ronda los 22-24 euros y este set con el labial, la paleta y el neceser costó 20, echa cuentas. Tengo cuatro Melted de otro set de Navidad y son más pequeños, 3 ml. Y mira si me gustan "poco" estos cinco, que en enero acabé comprando otro color suelto. De no tener ninguno, a hacerme con seis Melted Matte en un mes.
El neceser es una preciosidad también. Es rojo brillante y con relieves de ositos de gominola, además de las letras Too Faced en dorado y una bonita cremallera con forma de corazón y de nuevo las letras de la marca. Si en unos años el neceser se termina estropeando o rompiendo o lo que sea, no descarto quitarle este corazón y usarlo como colgante. Belleza aparte, el neceser es transparente, de tamaño generoso y para viajes o desplazamientos es ideal para guardar nuestro maquillaje o productos de belleza. O como estuche para bolígrafos, etc.
La paleta es el producto estrella del kit (sin menospreciar para nada al labial y al neceser). ¡Se han lucido con las tres cosas, qué chulo todo!. De tamaño pequeño-mediano, cuadrada y de color rosa con los ositos de gominola en rojo y con relieve. Preciosa. Al abrirla, hallamos un espejo con osito a un extremo. Igual de rosa y bonita que por fuera, y lo mejor es que los productos no se quedan precisamente atrás.
Las ocho sombras de ojos son de tonos neutros, ciruelas y marrones, por lo que resultan 100% ponibles y versátiles, ideales tanto para maquillajes de diario como más potentes. Suma que a las morenas estos tonos nos quedan de 10.
- Cereal Milk: vainilla mate, para iluminar bajo la ceja o como base para otras sombras.
- Slow Burn: ciruela / vino ligeramente satinada, elegantísima y muy favorecedora.
- Sweet N´Spicy: marrón cálido suave y brillante.
- Chocolate Dipped: marrón oscuro mate con matiz rojizo o ciruela.
- Cinnamon Sugar: precioso rosa salmón muy brillante.
- Red Hots: rojo mate. Si no es el mismo rojo que el labial, poco le faltará.
- Pop of Chili: ciruela metalizado muy brillante, espectacular.
- Bear Hug: arena mate muy natural.
Aprovecho para agradecer a Sephora el aluvión de ofertones que hizo entre Black Friday y Navidad, y descuentos gordos y reales, no como otras perfumerías que hacen el timo de "producto que siempre vale 18 euros, ponemos que costaba 60 y lo rebajamos a 15 = la clienta compra como loca creyendo que está ahorrando 45 euros, cuando en realidad el descuento es de 3". Y lo mejor es que esta treta la hacen perfumerías baratas, mientras que no veas qué descuentazos hizo Sephora, siendo la más cara. Les pillé a precios de cachondeo este set Cinnamon Bear, otro estuche de Navidad con cuatro Melted Matte, un Melted Matte suelto, un colorete de Natasha Denona y una paleta de iluminadores también de Natasha.
NOTA: 10 / 10
miércoles, 5 de mayo de 2021
Productos de maquillaje terminados y renovados (3 mayo 2021)
El lunes tiré unos pocos productos que ya estaban en las últimas, y los he cambiado por nuevos:
Finalizados
- Máscara de pestañas False Lash Effect (Max Factor): tenia más de un año y ya estaba agonizando. Buenísima.
- Máscara de pestañas Damn Girl! (Too Faced): ¡año y medio o más llevaba con ella! creo que nunca una máscara me había durado tanto, y eso que era tamaño viaje. Claro: me la ponía poquito -desde la pandemia me maquillo con mucha menos frecuencia-. Añade que lo que hacía era usar la de Max Factor de diario y reservar la Damm para ocasiones especiales. Extraordinaria, no descartaría comprarla en un futuro muy lejano (tengo dos máscaras por estrenar).
- Prebase The Porefessional (Benefit): también el tamaño pequeño, y 3 añazos ha durado -ídem: la reservaba para maquillajes currados o de fiesta-. No me disgusta pero ni fu ni fa, no siento que necesite prebases faciales y se me hacen totalmente prescindibles. Tenía dos envases pero porque me los regalaron, que si no, estás que la compro.
- Base de maquillaje Teint Idole Ultra Wear (Lancome): ha durado algo más de un año, lo mismo, siendo tamaño "enano" de 5 ml. Buena base pero tampoco me volvía loca.
- Lápiz de ojos negro Tattoo Liner (Maybelline): segundo que tuve, ha durado un año y poco.
Sustitutos
- Máscara de pestañas: estreno la Big Ego (Tarte). A diferencia de las dos que he despachado solo usaré ésta y no la alternaré con otra, así que durará menos. Para cuando la termine tengo la máscara Maneater, también de Tarte. Tengo sin estrenar dos mini-máscaras de la They´re Real de Benefit, pero las voy a regalar. Es una máscara excelente, pero no soporto lo muchísimo que cuesta de desmaquillar.
- Prebase The Porefessional (Benefit): tenia otro tubo sin empezar. Tal y como expliqué, no me parece un producto de "woooow", pero gastaré el segundo de todas formas. Intentaré darle más uso para que no dure tanto como el primero.
- Base de maquillaje: estreno la Dream Velours (Maybelline). Con calma también, pues una base me suele durar más de un año y ésta es el tamaño estándar de 30 ml. Tengo también una base de Revlon y dos muestras de base de Sephora, pero esas las dejo para cuando termine la primera.
- Renovado por tercera vez el lápiz de Maybelline: tiene pinta de que mientras lo sigan vendiendo no cambio de lápiz de ojos. Qué buenísimo es, increíble. ¡Y tirado de precio!.
domingo, 2 de mayo de 2021
Barbaridades de belleza que cometía en mis años mozos
- Morderme las uñas: por culpa de este pésimo hábito no lucí uñas bonitas hasta los 28-29 años, que fue cuando conseguí dejar de morderlas. Todavía no me creo la diferencia entre aquellas "uñas" a cómo las llevo hoy. Escribí post sobre ello y puse fotos del antes y el ahora.
- Piercings en la cara: a los 20 me los hice en ceja, labio, lengua y ombligo. Adoraba el de la ceja -me pegaron muy bruto el nu metal y Jonathan Davis- y lo llevé unos años, pero los otros me los quité enseguida. El de la lengua me golpeaba los dientes y no aguanté ni un mes, y el del labio provocó que por el roce permanente con la plaquita de metal las encías de los dos incisivos centrales de abajo se empezaran a retraer y se viera más diente. Fue quitarlo y con el tiempo la encía se regeneró. Estéticamente me creía "cool" por llevarlos y hoy me parecen un atentado a la vista todos los piercings faciales sin excepción. Y menos mal que al tener los labios gruesos, al estar el agujerito justo debajo del labio inferior me lo tapa por el grosor y no se ve, pero ahí debajo sigue el puntito. Solo conservo el piercing del ombligo, que es el único que me parece bonito.
- Depilarme las cejas con cuchilla de afeitar: lo hice muchísimos años. Me daban pánico las pinzas, temía el dolor (leí que incluso hay mujeres que utilizan crema anestésica antes de depilarse las cejas). Ahora llevo tanto tiempo con las pinzas que no noto la más mínima molestia. Y el resultado con uno y otro método = sin comentarios.
- Decolorar mis cejas negras y pretender pasar por "rubia": lo hacía cuando llevaba el pelo aclarado frito, para armonizar. Las decoloraba hasta que quedaban amarillas y las pintaba con lápiz marrón, iba "preciosa". Y estética aparte, va un mundo entre llevarlas en mi color natural y la comodidad de no tener que hacerles nada, a aquella esclavitud de tener que decolorarlas cada pocas semanas y estar siempre pendiente de su maquillaje para que no se viera el horrible amarillo decolorado -en piscina o playa era un problemón-. Moraleja: morenazas de pelo y cejas azabache que queráis poneros rubias, pensadlo bien, porque lo más probable es que hagáis el ridículo.
- Usar el decolorante como si fuera champú: a partir de los 18-19 años eso fue una locura. Dos o tres decoloraciones en un día, varias decoloraciones en una semana / mes, pasar de negro a rubio o rojo como quien cambia de camisa, luego volver al negro y a las tres semanas al rubio... Puedo dar gracias a los dioses por tener cabello y no tener calvas ni problemas de caída ni nada.
- Agua oxigenada para "aclarar" el cabello: sí, yo también caí.
- Llevar el pelo a lo chico: creía que iba divina y transgresora (fruto de la rebeldía rockero-chorra de los 18), y ahora miro fotos y qué dolor. Prefiero infinitamente el pelo largo, y el corto tiene que ser mínimo melenita / bob y siempre cortos femeninos y estilosos. Cortísimo o a lo chico, solo si te llamas Sharon Stone, Halle Berry, Audrey Hepburn o Shirley McLaine. Eso sí: al menos nunca llevé rapados ni similares.
- Cortarme el pelo yo (y con tijeras de la cocina o de coser): lo llevaba por los hombros o más largo, agarraba las tijeras, y zas. Si podemos causar un estropicio con un simple corte de puntas, imagina si hablamos de dejar el pelo por la barbilla. Ahora lo llevo largo pero da igual: he abandonado lo del corte casero y ya siempre me retoco las puntas en peluquería. La diferencia es abismal.
- No saber maquillarme ni vestir: ya me hubiera gustado maquillarme con 18 años como me maquillo ahora. Ídem con la ropa: entre el pelo cortado con las tijeras de la cocina + cara con piercings que parecía una ferretería + ropa metalera en plan saco, llevaba unas pintas que no entiendo cómo ligaba (y no poco). Luego seguí vistiendo rockerilla pero infinitamente más elegante, sexy y femenina. Eso sí: NADA como la comodidad de saltar toda la noche canciones como "Killing In The Name" en pantalon ancho y deportivas.
- Venerar el maquillaje de bazar chino: de adolescente era ritual, ir sola o con la amiga y pillar mogollón de productos (mítico el lápiz de ojos negro automático de Carlo di Roma). La idea era comprar un montonazo de cosas por dos duros, primando cantidad sobre calidad. Hoy es al revés: no me gusta nada acumular, me he aficionado al maquillaje de alta gama, y prefiero tener un solo colorete excelente de 40 euros que comprar veinte malos solo porque son baratísimos. Aunque hay maquillaje genial y económico como el de marcas tipo Maybelline o Revlon, pero del chino o marcas blancas de supermercado = nunca más.
- Salir de las clases de taekwondo e irme con la compañera a la panadería cercana a atiborrarnos de berlinas de chocolate, chucherías o bolsas de patatas: ¡jajajajaja, pues esto sí lo repetiría!.