Desde que vi "Barbarella" (1968) me enamoré de Jane Fonda; siendo una de las actrices más guapísimas y sensuales que he visto en una pantalla -ya quisieran la mayoría de "sex-symbols" del cine actual llegarle a la suela de los zapatos cuando era joven-. No es de extrañar teniendo en cuenta lo "poco" guapo que fue su padre: Henry Fonda (uno de mis actores favoritos del cine clásico). Aunque para mi gusto, el nivel de belleza terminó de explosionar con la hija.
Dicen que quien tuvo retuvo y en su caso se ha cumplido a rajatabla, pues hoy con casi 80 años Jane Fonda conserva un físico fenomenal (otras que tal bailan son Lynda Carter o Raquel Welch). Seguro que le han ayudado sus legendarios vídeos de aerobic ;)
Prueba de lo tremendamente bien que se mantiene Jane, son sus apariciones en festivales y eventos del estilo. El otro día vi ésta (Festival de Cannes 2012), y me FASCINÓ. Aparte de su extraordinario aspecto me encanta la elegancia y naturalidad que desprende, y el vestido me ha ENAMORADO. Ese rosa metalizado tan precioso, el brillo, el corte del vestido, la delicada parte transparente, la cola... sirena total. Y con el tipo de Jane, pues apaga y vamonos. El estilista de este look merece una catedral, en serio. Es que iba PERFECTA.
Y ese maquillaje en tonos rosados suaves, a juego con el vestido, es AMOR.
Para que luego digan que la belleza y atractivo en una mujer terminan a los 30-40.
Lo dicho: me encantaba de joven y me encanta ahora.