En sus inicios, la británica I Heart Makeup (ahora se llama I Heart Revolution) se hizo muy popular especialmente por sus paletas de sombras con forma de tabletas de chocolate. Buena calidad, precio asequible y ese chulísimo diseño hicieron que dichas paletas se vendieran como rosquillas.
Las primeras en aparecer fueron la I Heart Chocolate, la Death by Chocolate, la Naked Chocolate y la Pink Fizz. Yo piqué con las cuatro, aunque las dos primeras las regalé y solo me quedé con las otras dos. A raíz del exitazo siguieron sacando más paletas con el mismo diseño de tableta de chocolate, pero llegó un punto en el que saturaron a lo bestia, pues cada poquísimo tiempo lanzaban una nueva y en muchos casos solo variaba el color del envase y el de alguna sombra y poco más. Era sacar por sacar. Actualmente tienen tropecientas paletas, a mí me colapsaron y perdí todo interés en comprar alguna. Las primeras estaban más cuidadas y los colores eran más especiales, y mis favoritas siempre serán la Pink Fizz y la Naked Chocolate. Para mi gusto, si tienes esas dos no necesitas ninguna más.
Naked Chocolate contiene íntegramente sombras en la gama del marrón. Si nos gusta y usamos mucho este color en los sombreados, la presente paleta es un festival. Claro que si preferís variedad cromática, con ella os aburriréis de lo lindo. Ya digo: única y exclusivamente marrones. De más claros a más oscuros, hay vainillas, dorados, beiges, tostados y chocolates. Por su naturalidad, belleza e infinita versatilidad para cualquier fisonomía facial, estilo e intensidad de maquillaje, tener sombras neutras y marrones es imprescindible en cualquier arsenal de cosmética. Por eso, paletas como ésta siempre son apuesta segura. Como paleta de marrones buena, bonita y barata es genial. Tengo varias paletas de marrones de alta gama y con la Naked Chocolate me hago ahumados igual de bonitos. Las sombras son más que decentes en pigmentación, textura, duración etc y consigo sombreados perfectos -desde tostados suaves a marrones oscuros-. No son Huda Beauty ni Tarte, pero a mí me salen los ahumados prácticamente iguales con todas y no noto apenas o nada de diferencia cuando me hago un sombreado marrón con la Naked Chocolate o con la paleta Monsieur Big de Lancome, por poner un ejemplo.
El pincel podría ser mejor, aunque usamos alguno bueno que tengamos y listo. De todas formas, para viajes y desplazamientos hace el apaño perfectamente. También hay amplio espejo y lámina protectora con los nombres de las sombras, tan chocolateros como "Tob-le-rone", "Frosted Choc" o "Mocha Lover". Y qué decir del llamativo, original y precioso envase con forma de tableta de chocolate blanco. Parece de verdad ¡quien esté a dieta ni se le ocurra tenerla a la vista!.
Hace unos años, como la marca cambió de nombre también relanzaron productos como esta paleta: antes se llamaba Naked Chocolate y ahora es White Chocolate. Es el único cambio, en todo lo demás es idéntica a la primera. Dependiendo de la tienda y stock hallaremos una u otra.
Cuesta 10 euros, aunque como la lanzaron hace tanto tiempo, hoy es posible adquirirla por 6 o 7.
Ideal si buscamos una buena paleta de sombras neutras y tostadas sin tener que gastarnos 30, 50 o 70 euros (o los 120 que pagué hace unos meses por la paleta Sailor Moon de Shu Uemura, también de sombras marrones).
NOTA: 9 / 10