viernes, 8 de diciembre de 2017

Plancha Remington Ceramic 215 / S1450 - Remington

Mi cabello es el típico muy liso que se ondula un poco en las puntas: comodísimo y me gusta su forma al natural, y esto hace que no necesite usar aparatos ni fijadores ni nada de nada para moldearlo, pues lavado y secado al aire ya queda con forma bonita. 

Por esa razón, plancha usaré cuatro veces contadas en todo un año; de hecho es que no me gusta NADA utilizarlas. De paso aprovecho y no estropeo el pelo (igual = jamás uso secador, ni siquiera en invierno). Pero pese a mi fobia planchesca me gusta tener siempre una, para esas raras ocasiones en las que decido alisar mi pelo en plan tabla.

La actual la adquirí hace varios meses y la he usado una vez -compra "inteligente"-. Se trata de la Remington 215. Para ser más exactos: Remington Ceramic 215 / S1450.

Revestimiento de cerámica. No tiene selector de temperatura. Alcanza los 215 grados y posee placas flotantes que hacen que el cabello deslice con total facilidad y ejercen la presión adecuada para cada mechón sin dañar su estructura. Se calienta en tan solo 30 segundos. El tamaño de las placas se ha aumentado al máximo y se han fabricado en un material que reparte de forma perfecta y homogénea el calor, de manera que alisa el cabello en mucho menos tiempo y "cuidándolo al máximo".

Eso de "cuida el cabello al máximo"... yo no sé si es que estas empresas nos toman por subnormales. Las planchas lo estropean SÍ o SÍ; ya sean Remington, GHD o Pepito de los palotes. Otra cosa es que bien alisadito el pelo aparente estar genial (que se lo digan a muchísimas famosas; el pelo precioso que lucen cuando lo llevan moldeado con aparatos y luego los mochos quemados que tienen al natural). Un cabello que frecuentemente se trabaje con plancha es cuestión de tiempo que termine siendo el festival de la sequedad y puntas quemadas, por muy buena que sea la máquina y mucha promesa de "sin daño" que hagan en su publicidad.


Y aquí viene la bomba: esta plancha me quemó las puntas con solo usarla UNA vez.  Al momento, recién alisado, mi pelo lucía bien bonito... pero al día siguiente tenía las puntas para tirarlas a la basura ¡¡¡¡completamente quemadas!!!! -ríete de Starfire, foto arriba-. Las tenía perfectas y se quedaron sin forma y parecían un ovillo de alambres: fritas fritas... y usé protector térmico. Y ni mascarillas ni aceites ni nada lo solucionaba. Resultado: tuve que cortarlas. Que no fue un drama y solo corté 2 o 3 cm, pero es que llevo siglos usando plancha y nunca me había pasado que me estropearan tanto el pelo, y menos con un solo uso. No tenía pensado cortarlo y tuve que hacerlo por culpa de esta plancha asquerosa. 

Alisar alisaba bien (como para no hacerlo, con lo liso que es mi cabello), pero las he usado mejores.

Lo de pulverizarme las puntas con solo usarla una vez y que por ello acabara cortándolas, no se lo perdono. Vale que mi pelo es finito y no tendrá mucha resistencia a las planchas, pero reitero que he usado otras en el pasado y nunca me había sucedido esto. He cogido miedo a usarla. Hace varios meses de aquello y no he vuelto a tocarla; ahí está en la caja muerta de risa, y hasta pienso en tirarla o regalarla. Va a pasar tiempo laaaaaargo hasta que vuelva a usar esta plancha, si es que vuelvo a hacerlo.

Seguiré con mi pelo liso-ondulado al natural, y si un día lo quiero poner liso tabla me haré la toga, que aunque tarde horas me compensa que no estropea nada el cabello. Y para ondular, mis mejores amigos son los rulos. De los aparatos de calor ya huía antes, y ahora ni te cuento.

"Lo bueno" es que salió tiradísima de precio, dado que la adquirí usando esos tickets de Carrefour que acumulas por compras y en los que te van regalando descuentos para las siguientes. El precio de esta plancha es de 20 euros -nada cara-, y gracias al descuento me salió por 7. Claro que yo pensaba que había adquirido el chollo del siglo (una plancha Remington por 7 euros), y bien cara que le salió a mi pelo. Y reitero que no la pienso volver a usar.

"Gracias" a ella, si antes usaba plancha tres veces al año, ahora sí puedo jurar que a mi melena no la vuelve a tocar un aparato salvo en caso de extrema necesidad. A esta plancha le auguro unas telarañas bonitas en los próximos meses / años.

Y eso que las planchas Remington tienen fama extraordinaria. Por mi parte: primera y última vez que les compro un producto.

NOTA: 0 / 10