Llevo 17 años decolorándome el pelo. Por suerte solo lo hago una o dos veces al año -cuando me da la neura del cambio de look- (y cuando lo hago, pues ha habido años que he sido lista y no me he tocado el negro: color que mejor me queda con diferencia abismal). Ya pasé la época de llevar cada mes un color diferente, y ahora prefiero ser "aburrida" pero llevar siempre el pelo con el que más guapa estoy, a estar cambiando y que no me sienten tan bien.
Y lo único malo de llevarlo siempre teñido de mi amado negro azulado: que si alguna vez me apetece cambiar a más claro, al ser tinte negro tengo que decolorar por narices. Y ya sabemos que decolorar daña el cabello sí o sí, pero es que una decoloración mal hecha puede resultar en catástrofe (leer esto y esto).
El decolorante ABRASA literalmente el cabello. El resultado es un pelo quemado, sequísimo y chicloso, desaparecen totalmente el brillo y la suavidad, las puntas se deshacen y se rompen con mirarlas, apenas se puede peinar, se te queda media melena en el peine... Y puedes dar gracias si "solo" te ocurre eso, pues en casos más graves puede provocar quemaduras en el cuero cabelludo y una importante caída del pelo.
Aunque tampoco criminalicemos la decoloración: me la he hecho mil veces y sigo con pelo, y en mi experiencia siempre se recupera (mis cuidados aquí) y vuelve a estar fuerte, nutrido, super suave y brillantísimo como antes. Y dependiendo del estado del cabello, de la calidad de los productos y de cómo realicemos el proceso, al igual que unas veces puede quedar masacrado otras he conseguido que quedara sin apenas daño. Importante: nunca decolorar si ya está estropeado, seco y débil de antes, porque ahí sí tendremos papeletas para terminar cortándolo por las orejas. Procurar siempre que vayamos a decolorar que el cabello esté en el mejor estado posible. Si no, cuidarlo a lo bestia y esperar lo que haga falta hasta proceder a la decoloración. Mejor tardar más y que siga estando presentable, que ir a lo loco y terminar llorando viendo cómo se nos ha quedado el "pelo" (me ha pasado).
Y SABER HACERLA (leer, leer y leer), así como seguir a rajatabla las instrucciones del fabricante y vigilar a tope el tiempo de exposición: jamás superar los 40-45 minutos. Es muy tentador alargarlo para así aclarar más, pero exterminará el pelo. Según leí hace poco, ahora con la fiebre de teñirse de colores fantasía, para conseguir un aclarado extremo muchas chicas de países latinoamericanos son muy dadas a dejarse el decolorante puesto ¡¡varias horas!!. Lloro.
Y lo único malo de llevarlo siempre teñido de mi amado negro azulado: que si alguna vez me apetece cambiar a más claro, al ser tinte negro tengo que decolorar por narices. Y ya sabemos que decolorar daña el cabello sí o sí, pero es que una decoloración mal hecha puede resultar en catástrofe (leer esto y esto).
El decolorante ABRASA literalmente el cabello. El resultado es un pelo quemado, sequísimo y chicloso, desaparecen totalmente el brillo y la suavidad, las puntas se deshacen y se rompen con mirarlas, apenas se puede peinar, se te queda media melena en el peine... Y puedes dar gracias si "solo" te ocurre eso, pues en casos más graves puede provocar quemaduras en el cuero cabelludo y una importante caída del pelo.
Aunque tampoco criminalicemos la decoloración: me la he hecho mil veces y sigo con pelo, y en mi experiencia siempre se recupera (mis cuidados aquí) y vuelve a estar fuerte, nutrido, super suave y brillantísimo como antes. Y dependiendo del estado del cabello, de la calidad de los productos y de cómo realicemos el proceso, al igual que unas veces puede quedar masacrado otras he conseguido que quedara sin apenas daño. Importante: nunca decolorar si ya está estropeado, seco y débil de antes, porque ahí sí tendremos papeletas para terminar cortándolo por las orejas. Procurar siempre que vayamos a decolorar que el cabello esté en el mejor estado posible. Si no, cuidarlo a lo bestia y esperar lo que haga falta hasta proceder a la decoloración. Mejor tardar más y que siga estando presentable, que ir a lo loco y terminar llorando viendo cómo se nos ha quedado el "pelo" (me ha pasado).
Y SABER HACERLA (leer, leer y leer), así como seguir a rajatabla las instrucciones del fabricante y vigilar a tope el tiempo de exposición: jamás superar los 40-45 minutos. Es muy tentador alargarlo para así aclarar más, pero exterminará el pelo. Según leí hace poco, ahora con la fiebre de teñirse de colores fantasía, para conseguir un aclarado extremo muchas chicas de países latinoamericanos son muy dadas a dejarse el decolorante puesto ¡¡varias horas!!. Lloro.
Exceptuando cuatro veces que me he decolorado en peluquerías, siempre me lo hago yo en casa. Estos son los decolorantes comerciales que he usado a día de hoy:
- Decolorante Nutrisse (Garnier): Llamado "Natea" hace muchísimos años. Fue el primero que utilicé hace 17 años y le siguieron innumerables veces. No usaba otro. Decoloraba muy intensamente y el nivel de daño era aceptable: desde luego no me dejaba el pelo indemne, pero los he usado muuuucho más dañinos. Es el mejor decolorante que he usado después del Olia. Hace unos años debieron retirarlo, pues no lo he vuelto a ver en ninguna tienda. Costaba 5 euros.
Versión prehistórica: el que me daba hace 17 años, cuando se llamaba "Natea":
Versión moderna (también retirada):
- Decolorante ColorCrem: creo que ya no se comercializa tampoco, habiendo sido sustituido por el actual Blonde Box de la misma marca. Decoloración intensa aunque no tanto como el de Garnier, y daño al cabello bastante alto. No es buen producto, NO lo recomiendo. Costaba entre 4 y 5 euros en perfumerías. Solo lo compré una vez y no repetí.
- Decolorante Blonde Box (ColorCrem): HORROR ABSOLUTO. Fue el decolorante que usé cuando me ocurrió esto. Sinceramente este producto debería estar prohibido, así lo digo. Cuesta 5 euros que salen MUY caros: tuve que gastarme una pasta en productos de peluquería para evitar tener que cortarme el pelo a lo chico. Es ver la caja y me dan ganas de desmayarme al recordar cómo me dejó la melena. Anda que esta marca se ha lucido con sus decolorantes...
- Decolorante Creme Intense (Nelly): aunque parezca increíble, es todavía peor que el anterior. Me MASACRÓ el cabello hasta el infinito y más allá, a tal punto de que a diferencia del Blonde Box, fue imposible mejorarlo con productos. Resultado: tuve que cortar toda la parte quemadísima y pasé de pelo por encima del pecho a melenita por los hombros. Maldije todo lo habido y por haber, y mejor ni menciono el bajón. El tinte negro azulado de esta marca va fenomenal, pero el decolorante, sin comentarios. Eso sí: aclara una auténtica burrada, es el decolorante de super más potente que he usado (y potente en dañar, también).
- Decolorante Olia (Garnier) y decolorante / super aclarante L1 Nordic Blonde: los mejores con diferencia. Agarraos porque lo que sigue es completamente cierto -al menos en mi caso-: apenas estropean el cabello. Lo resecan un poco pero nada grave y que no se arregle en un par de semanas aplicando toneladas de mascarillas y aceites. Pero lo que es quemarlo y dejarlo en un estado lamentable, en absoluto. Tras usarlos, mi pelo siempre quedaba prácticamente igual que antes de decolorar. No sé si de verdad influirá tanto que no llevan amoniaco (y que Olia está enriquecido con aceites), pero sí sé que son los decolorantes menos dañiños que he usado. Ni tacto ni aspecto estropajo, ni sequedad enorme, ni pelo quemadísimo, ni rotura de que se cae a mechones... nada. Tampoco tomarlo como carta blanca y recordar que cada pelo es un mundo: otros sí se podrán machacar. Y siempre máximo respeto a la decoloración y si se puede evitar, mejor. Pero si decidís hacerla en casa y usar producto de supermercado, yo elegiría uno de éstos. Precio Olia: 6.50 euros. Nordic: 5.75 €. Edito: al igual que con cualquier otro decolorante de supermercado, cuidado si lleváis muchos tintes negros acumulados: en ese caso, es posible que no aclaren apenas y que el pelo quede a mil colores: marrón rojizo super oscuro, naranja, negro, cobrizo, y por supuesto, las raíces amarillas casi blancas. "Precioso".
Decolorantes profesionales nunca he comprado, porque sinceramente, habiéndome decolorado en peluquerías y visto los "resultados", no creo que me esté perdiendo nada estratosférico. Igual: me tiño todos los meses de negro azulado usando tintes de perfumería y me dejan el color y el pelo perfectos. Una vez me teñí de negro en peluquería, y nada que no consiga de la otra forma.
Por supuesto siempre hay que intentar optar por productos de la mejor calidad, pero al igual que sucede con el maquillaje: quitando casos de productos abominables que no tienen solución, al final muchas veces cuenta más la habilidad de la persona que el producto en sí.
Respecto a decolorarme en peluquerías, me lo han hecho en cuatro:
- En un salón (NO franquicia) de renombre, premios nacionales incluidos, en una zona de playa fuera de mi ciudad -era mi primera decoloración en peluquería y fui allí por su buena fama-: me consiguieron un aclarado muy intenso pero un "rubio" tan naranja butano horrendo que no podía ni mirarme al espejo, así que al día siguiente me eché tinte negro azulado. Y tardé tiempo en recuperar el brillo, suavidad y buen estado de mi pelo, dado que me lo dejaron para tirarlo a la basura. Sobra decir que no he vuelto. Si esto te lo hacen en "salones de renombre"......
- En dos peluquerías de mi barrio: en la primera, se ve que el hombre tenía miedo a quemarme el pelo y no tuvo valor para decirme que no iba a aclarar mucho, y quedó ¡castaño oscuro!. Vamos a ver: si me quito el negro negrísimo es para verme diferente a tope y conseguir un aclarado considerable. No rubio platino pero sí pedí un castaño muy claro / rubio oscuro o medio; me daba igual el tono, pero que se viera claro. Para dejarme el típico castaño oscuro soso me quedo con mi negro azulado mil millones de veces. Eso sí: se llevó su buen pastón por aclararme dos tonillos ridículos, cuando me aseguró que me lo dejaría bien claro.
- En otra de mi barrio, para rematar: leer aquí lo que me hizo esa buena mujer cuando me decoloró. Y aparte de quemarme el pelo Y LA CARA, otra que por "claro" entendió "marrón oscuro". Hijos míos: que yo en casita me lo dejo mucho más claro, y es cierto que decolorar bien lo hacen pocos peluqueros pero si no os atrevéis o no sabéis hacerlo, al menos sed valientes y decidlo, antes de que me gaste el dineral para nada.
- Y la última vez, en una peluquería del centro de la ciudad donde ocurrió lo mismo: no se atrevieron o no supieron hacerme decoloración intensa y me lo dejaron castaño oscurísimo y aún peor que las otras veces, ya que estaba todavía más oscuro. Pedí un tono doradito y salí con el pelo prácticamente como cuando entré; de hecho seguía con toda la base negra azulada solo que al sol se vislumbraban unas pocas mechitas marrón oscuro, y en interiores se veía negro deslavado. Menudo "aclarado". Y como odio el castaño oscuro, al día siguiente me eché tinte negro azulado. No aguanté ni un día con ese "color". Y sí: pedí salir rubia y salí con el pelo negro, y tonta de mí por pagarles. Al menos ahí me costó menos dinero que las otras veces, pero el disgusto fue también bonito.
Resumiendo: en todas me dejaron el pelo frito y con un color horrible (naranja butano) o muy lejos de lo que había pedido (oscurísimo). Y quemadura en la cara de regalo. No niego que hay peluquerías que decoloran estupendamente -no hay más que ver a las famosas-. Pero tras MIS experiencias ¿se supone que debe ser criticable que yo o cualquier otra mujer nos queramos hacer estas cosas en casa? teniendo en cuenta que me lo he llegado a dejar mil veces mejor y sin ser peluquera ni quemarme la cara...
De todos modos, ya sea en peluquerías o haciéndolo por nuestra cuenta, lo que siempre digo: si se puede evitar la decoloración, mejor. Repito que el pelo siempre se recupera, pero eso sí: prepárate para pasarte meses esclava total de tu cabello, hasta conseguir repararlo.
Yo desde luego; comparando mi pelo cuando lo llevo negrísimo hiper-brillante, sano, suavísimo y que lavado y secado al aire ya se queda perfecto, a cuando decoloro y en él se pueden freir huevos sin usar aceite y al natural es un manojo de cardos, que me esperen sentados los decolorantes, que ya no vuelvo a caer.
Yo desde luego; comparando mi pelo cuando lo llevo negrísimo hiper-brillante, sano, suavísimo y que lavado y secado al aire ya se queda perfecto, a cuando decoloro y en él se pueden freir huevos sin usar aceite y al natural es un manojo de cardos, que me esperen sentados los decolorantes, que ya no vuelvo a caer.