Tedi es una cadena alemana de tiendas repartidas por toda España y especializadas en productos para el hogar a precios económicos: artículos de regalo, decoración, juguetes, droguería, accesorios, material de oficina, artículos de fiesta, herramientas...
No voy casi nunca por no decir nunca, y en tiendas de este tipo me quedo con Dealz. Pero hay un producto en Tedi que para mí se ha convertido en compra fija: sus extensiones de pelo.
Antes de nada: quienes uséis extensiones POR FAVOR procurad llevarlas del mismo color, forma y densidad que vuestro cabello, y que no sean esas "extensiones" que parece que llevas un gato muerto colgando, por no hablar de las que son dos pelillos de rata y se nota perfectamente dónde acaba el pelo natural y dónde empiezan los pelajos de plástico. Que se ve cada cosa que es para llorar hasta el fin de los tiempos, y antes que llevar el "pelo" así, es millones de veces preferible llevarlo más corto pero bonito (aquí mencioné las bondades del cabello corto).
Extensiones como Dios manda:
Volviendo a las de Tedi: son las típicas extensiones de clip y sintéticas, no de pelo natural (me niego a pagar mínimo 300 euros por unas extensiones que me pongo cinco veces al año). De color negro; las hay también en rubio y creo que en castaño. Al teñirme de negro se fusionan a la perfección con mi cabello y más teniendo en cuenta que solo me las suelo poner para salir de noche. Aunque alguna vez me las he puesto de día, y lo mismo: no se nota nada que es pelo falso. Por supuesto, insisto en que hay que colocarlas bien. Y saber llevarlas. Y el color hace muchísimo: cuanto más claro sea el cabello más riesgo de que se noten. Pero las negras con pelo negro se mimetizan de forma absoluta.
Son suaves, lisas con ligera ondulación, muy bonitas, y brillantes pero sin brillo artificial y plasticoso. Mi pelo teñido de negro azulado ya brilla muchísimo, por lo que las extensiones negras se fusionan de maravilla con él. Reitero que a simple vista no se nota en absoluto que no es mi pelo auténtico.
Cuando me las pongo, las llevo o con melena suelta o en una coleta con todo el pelo engominado hacia atrás. De la segunda forma es como más suelo llevarlas, pues con maquillajes chulos para la noche es un peinado que favorece muchísimo, y además así llevo el pelo recogido y es más cómodo para bailar tantas horas.
Son suaves, lisas con ligera ondulación, muy bonitas, y brillantes pero sin brillo artificial y plasticoso. Mi pelo teñido de negro azulado ya brilla muchísimo, por lo que las extensiones negras se fusionan de maravilla con él. Reitero que a simple vista no se nota en absoluto que no es mi pelo auténtico.
Cuando me las pongo, las llevo o con melena suelta o en una coleta con todo el pelo engominado hacia atrás. De la segunda forma es como más suelo llevarlas, pues con maquillajes chulos para la noche es un peinado que favorece muchísimo, y además así llevo el pelo recogido y es más cómodo para bailar tantas horas.
Y no son como esas extensiones sintéticas que venden en forma de mechones finos y por tanto necesitas comprar más de una para obtener una buena mata de pelo. Con una sola de estas extensiones consigo melena completa, pues abarcan de ancho toda la cabeza.
A la hora de guardarlas uso el mismo plástico en el que venían, pero sin el cartón. Metidas siempre en él, me aguantan perfectamente conservadas.
Nunca me han interesado las extensiones permanentes que te cosen o pegan a tu propio cabello. Paso de quedarme calva (son terroríficas las fotos de famosas y no famosas con calvas tremendas tras pasarse años con las permanentes). Ya llevo máximo cuidado con que las de clip no me tiren del pelo durante las poquísimas horas que las llevo puestas, pues como para ponerme las permanentes que te tiran del pelo las 24 horas del día durante meses o años, y así acaba luego el pobre de debilitado y cayéndose.
Aparte de por evitar los tirones, yo las extensiones de clip las prefiero para uso puntual de cambio de look por unas horas, y el resto del tiempo llevar mi pelo al natural. Las de Tedi las utilizo esencialmente para salir de fiesta, y alguna rara vez que me las he puesto de día. Por supuesto, nada impide si alguien quiere usarlas con cierta frecuencia.
Aparte de por evitar los tirones, yo las extensiones de clip las prefiero para uso puntual de cambio de look por unas horas, y el resto del tiempo llevar mi pelo al natural. Las de Tedi las utilizo esencialmente para salir de fiesta, y alguna rara vez que me las he puesto de día. Por supuesto, nada impide si alguien quiere usarlas con cierta frecuencia.
Los clips agarran perfectamente y sin tirar ni lastimar el cabello natural (si se saben poner bien, y reitero que no es lo mismo ponerte extensiones cinco veces al año, que todos los días). El agarre es absoluto y las extensiones no se caen ni por asomo: constatado tras horas de bailoteo y saltos metaleros hasta el techo.
Las he comprado ya tres veces (la última hace nada; de hecho las tengo sin estrenar) y cada una me dura unos 6 meses y a veces más, dependiendo de si no se han estropeado. Aunque me las ponga con tan poca frecuencia, son bastante delicadas y conforme las vamos usando se van enredando pelos, van saliendo nudos y en definitiva se van poniendo cada vez más feas y al final eso parece más un matojo de cardos negros, que una mata de pelo bonito.
Al principio sí, pero conforme pasa el tiempo llega un momento en el que es imposible desenredarlas y devolverlas a su estado original, y tengo que tirarlas. Y mucho cuidado con dejarlas en el cuarto de baño antes de ponérselas, puesto que a las mías una vez les cayó agua de la ducha y cuando secaron se quedaron completamente enredadas y apelmazadas, horribles. Las tuve que tirar. Desde entonces, a mil kilómetros del agua.
Hay que tratarlas como si fueran seda, para así prolongar su buen aspecto. Aunque por 4.50 euros que cuestan, me compensa con creces comprar unas nuevas. En cuanto veo que ya no lucen = sustitución.
Así pues; gracias a Tedi por menos de 5 euros me aseguro para ocasiones especiales cambio de look con melena hiper-larga. ¡Mejor, imposible!.
Al principio sí, pero conforme pasa el tiempo llega un momento en el que es imposible desenredarlas y devolverlas a su estado original, y tengo que tirarlas. Y mucho cuidado con dejarlas en el cuarto de baño antes de ponérselas, puesto que a las mías una vez les cayó agua de la ducha y cuando secaron se quedaron completamente enredadas y apelmazadas, horribles. Las tuve que tirar. Desde entonces, a mil kilómetros del agua.
Hay que tratarlas como si fueran seda, para así prolongar su buen aspecto. Aunque por 4.50 euros que cuestan, me compensa con creces comprar unas nuevas. En cuanto veo que ya no lucen = sustitución.
Así pues; gracias a Tedi por menos de 5 euros me aseguro para ocasiones especiales cambio de look con melena hiper-larga. ¡Mejor, imposible!.
NOTA: 10 / 10