Soy muy fan de utilizar aceites naturales en cabello y rostro: el cutis queda como si le hubieras pasado Photoshop, y despídete de pelo seco o estropeado. Mi favorito es el de coco, y mi último descubrimiento ha sido el de linaza. No lo he usado en la cara; únicamente lo compré para el pelo.
La semilla de linaza (lino) es muy rica en nutrientes y fortalece y regenera el cabello, evita la caída, lo hidrata y promueve el crecimiento. Adquirí este aceite para lo último, ya que ando en misión prioritaria de volver a tener pelo largo tras el mega-cortazo de finales de julio. Estoy contentísima pues está creciendo a muy buen ritmo: en agosto ni llegaba a los hombros y ahora ya los pasa un buen cacho. De seguir así, para el próximo verano habré conseguido el objetivo.
Se trata de un aceite ecológico de linaza prensado en frío. En Aldi también compré hace tiempo para el cabello aceite de cacahuete y aceite de sésamo -comentados en el blog-.
Ya terminé la botella. Lo he usado durante dos o tres meses, todas las semanas, entre una y tres veces como aceite pre-lavado. Con todos es igual: embadurno bien el pelo, lo dejo actuar mínimo una hora, y a lavar.
Por desgracia no puedo asegurar si noté efecto: no sabría decir si esta velocidad de crecimiento se ha debido al aceite o a otros factores (lo primordial para fomentar el crecimiento del pelo es la alimentación). Desde luego, en estos meses me ha crecido un montón y no descarto que el aceite influyera. Mencionar que la marca Le Petit Marseillais tiene champú y mascarilla con lino y cuando los usé, casualidad o no, el cabello también me creció mucho en esos meses.
Afecte o no al crecimiento, por el precio que tiene, como tratamiento nutritivo y de cuidado puntual está fenomenal (al igual que otros aceites). Desde luego no vas a perjudicar al pelo, todo lo contrario.
Contiene 250 ml y cuesta 2.20 euros en supermercados Aldi. Al igual que el extraordinario aceite de coco Gutbio no es producto fijo, pero lo suelen traer con bastante frecuencia.
NOTA: 10 / 10