miércoles, 30 de agosto de 2017

Agua micelar con agua de rosas - Mildeen


La marca alemana de cosmética facial y corporal Mildeen se vende en supermercados Aldi -compartiendo estantes con la marca Biocura, también exclusiva de ellos-. De momento solo he usado dos productos Mildeen y ambos me tienen encantada: bálsamo labial y agua micelar.

¡Primera vez que utilizo agua micelar, y el estreno no ha podido ser mejor!.

Como sabemos, la diferencia primordial entre las limpiadoras faciales tradicionales y las nuevas aguas micelares es que las segundas limpian, tonifican e hidratan en un solo paso (si bien siempre hay que aplicar hidratación extra después). Tienen textura como si fueran agua normal, no de crema como las limpiadoras de siempre. No irritan ni resecan al evitar el contacto con el agua del grifo, poseen una tolerancia cutánea altísima, son aptas para cualquier tipo de piel, no dejan residuos grasos, y pese a ser tan suaves pueden incluso con maquillaje waterproof... y es que las micelas (moléculas especiales que "atraen" cualquier resto de suciedad e impurezas), pueden con todo.

Y el agua micelar de Mildeen es una JOYA. No he probado otras, pero con ésta se han lucido. 

Es una delicada y ultra-suave solución dermoprotectora indicada para retirar el maquillaje e impurezas acumuladas durante el día o noche. Contiene agua de rosas que alivia y refresca la piel manteniéndola protegida y sana, además de aportarle sus cualidades drenantes naturales y su delicada fragancia natural. Desmaquilla rostro y ojos sin resecar, y sus micelas en forma de micro-emulsión arrastran la suciedad mientras respetan el equilibrio cutáneo. Posee tolerancia extrema. Testada dermatológicamente; es apta para cutis sensibles, hipoalergénica y no contiene nada de alcohol, perfume, jabón, colorantes ni parabenos.


Llevo casi un mes con ella. Desmaquilla perfectamente de una sola pasada e incluso los maquillajes más elaborados, y mira que he usado limpiadoras que lo hacen genial, pero desde luego la publicidad no miente con respecto al enorme poder limpiador de las aguas micelares. Deja la piel 100% limpia, sublime, radiante. Mi cutis es normal tirando a mixto, y este producto lo deja genial.

Y sobre todo, para mí es comodísimo que a diferencia de las limpiadoras que siempre usaba, con el agua micelar no tengo que estar untando primero el producto antes de proceder a limpiarlo. Con el agua micelar Mildeen paso directamente el disco desmaquillante humedecido con ella, sin tener que masajear primero en la piel, y a medida que lo voy pasando por el rostro ya queda limpio y luego no necesita aclarado. Es decir: en un solo paso aplico y limpio, y encima no hay que retirar luego el producto. ¡Lo que antes hacía en tres pasos, ahora lo hago en uno!. Me encanta.

Rapidísima de utilizar, limpia perfectamente, deja la piel fenomenal, mucha cantidad y encima está super bien de precio. Es PERFECTA.

En todo caso lo único "malo" que le achaco es que el envase es bastante grande y puede resultar un trasto a la hora de guardarlo o llevarlo por ahí (aunque para eso están los envases vacíos de tamaño viaje). Pero compensa que trae muchísima cantidad, y que tiene pinta de que va a durar unos cuantos meses.

Contiene 500 ml y solo cuesta 3.19 euros en cualquier supermercado Aldi. 

Mejor estreno no he podido tener con la marca Mildeen (y con las aguas micelares). En breve comentaré un bálsamo labial de Mildeen que también me tiene enamorada.

NOTA: 10 / 10

lunes, 28 de agosto de 2017

Crema de manos Flor de Algodón - Laiseven


La marca especializada en productos corporales Laiseven pertenece a la valenciana Laboratorios Belloch. También es de ellos la marca capilar Nelly. Si bien ésta última es bien conocida por las mujeres españolas, a mí Laiseven ni me sonaba.

De hecho, este producto lo he conocido gracias a que lo regalan con el tinte Nelly. He repetido muchas veces -comentado aquí-, pues es uno de mis tintes negro azulado favoritos. Y resulta que desde hace un tiempo, cada caja viene plastificada y de regalo esta crema de manos (también depende de la tienda; he visto tintes Nelly sin la crema). Anteriormente regalaron un envase tamaño viaje de la laca Nelly, el cual tengo también.

Remarcar que el tinte que regala la crema es el "antiguo", porque ahora Nelly acaba de lanzar una gama de tintes que tienen pinta de que van a sustituir a los anteriores, no a tener los dos a la vez (ojalá). Hay tiendas donde he empezado a ver los nuevos y de los otros hay tonos que ya no traen. Me dará pena si finalmente lo retiran, porque el negro azulado era sensacional. ¡Aunque a lo mejor el  nuevo es incluso mejor!. 

Izquierda: el que regala la crema. Derecha: el nuevo. Por supuesto; teniendo en cuenta lo bien que me iba el antiguo, lo probaré.


Respecto a la crema de manos, es una emulsión ultra-reparadora (las manos más delicadas y estropeadas la amarán) y de tacto super agradable, fresca, nada grasa y de absorción inmediata. Su activo de flor de algodón, con propiedades hidratantes y acondicionadoras, aporta elasticidad y suavidad a la piel con efecto inmediato. Gracias a su contenido en vitamina E antioxidante mejora el aspecto de la piel de las manos al instante, hidratándola en profundidad y dejándola con aspecto luminoso..

No sé qué llevará entre sus ingredientes, pero me atrevo a afirmar que hasta el momento es la mejor crema de manos que he usado nunca. 

Cumple todo lo que promete y se queda corta: la textura como gel es una gozada y fresca, huele fenomenal, es super suave, se absorbe enseguida y deja las manos como Dios. Nutre a lo bestia y dicha nutrición se siente durante todo el día, y no deja nada de sensación pegajosa o grasa. La anterior crema de manos que tuve, de farmacia, mira que era tremenda, pero ésta de Laiseven me gusta todavía más.

Sorprendente y alucinante producto. Teniendo en cuenta el irrisorio precio del tinte Nelly, al ver la crema de regalo pensé que no sería nada del otro jueves, y menudo sorpresón (aunque me pasó lo mismo con el propio tinte: años sin comprarlo porque no me fiaba al ser tan barato, hasta que lo probé y madre mía). Para que luego digan que en cosmética todo lo muy barato es malo.

Contiene 30 ml. Es tamaño mini, a diferencia de las cremas de manos tradicionales que suelen traer 50, 75 o 100 ml. Pero no lo veo negativo, todo lo contrario: es comodísima a la hora de llevarla en el bolso y usarla fuera de casa. Ahora mismo la alterno con una crema de manos de Yves Rocher cuyo envase es más grande: en casa me aplico la de Yves Rocher, y fuera de casa me llevo la pequeñita de Laiseven.

En caso de que terminen retirando ese tinte Nelly o que éste deje de regalar la crema, tengo claro que repetiría con ella. Hasta ahora no me ha parecido verla en perfumerías vendida individualmente, pero será cuestión de buscar.

NOTA: 10 / 10


viernes, 25 de agosto de 2017

Champú y acondicionador de coco y aloe - Original Remedies (Garnier)


He comentado seis gamas Original RemediesLas únicas que no me han gustado de esta extensa colección (no paran de sacar gamas nuevas) han sido dos: la de pelo teñido y la de arce y almendra -solo el champú y la mascarilla, porque la crema sin aclarado es genial-. El resto de las que he probado me encantan todas: la de oliva, la de avena y arroz, la de argán y camelia, y ahora ésta.

Agua de coco y aloe vera es la más nueva que ha lanzado Original Remedies: este verano concretamente. De hecho, todavía hay comercios donde no hay ni rastro de ella. 

Agua de coco + aloe vera consta de un champú transparente en gel y de un cremoso acondicionador orientados a hidratar el cabello sin apelmazar. Para ello, ambos están totalmente exentos de siliconas. Un auténtico remedio hidratante que combina las propiedades del agua de coco y del aloe vera para un cabello intensamente hidratado, suelto y suave, sin apelmazar. Su textura en gel fundente con un fresco perfume aporta frescor y suavidad. Remedio respetuoso sin silicona ni parabenos. Resultado: cabello intensamente hidratado hasta las puntas y lleno de vitalidad. Tan puro y fresco como el agua de coco.


Todo es cierto: el pelo queda hiper-limpio al tiempo que hidratado, brillante y genial, con muy buen aspecto, SUAVÍSIMO, fresco, con mucho cuerpo y muy suelto y ligero. Y me aguanta limpio más tiempo que con otros productos, y al día siguiente de haberlo lavado sigue perfecto y no lo noto apelmazado ni feo, como a veces me sucede con otros.

NO los recomiendo para cabellos grasos, y mucho menos para los secos y estropeados: pueden quedarse cortos. Cabellos dañados deberían optar por productos más intensivos y reparadores. Pero si como en mi caso nuestro pelo está normal sin daños ni problemas, ahí sí nos irán de fábula.  

Lo malo es que al menos de momento, esta gama no dispone de mascarilla. Siempre las uso, cada vez que lavo el pelo, y yo creía que el acondicionador se me iba a quedar muy corto en nutrir, y más ahora en verano. Y para nada: deja el pelo super hidratado, muy nutrido y con una suavidad que alucinas. Nada que envidiar a muchas mascarillas (pese a ello, lo alterno semanalmente con una). OJALÁ saquen mascarilla, porque el champú y el acondicionador son tremendos, así que una mascarilla ya debería ser la bomba.

Y "para variar" con Original Remedies: huelen GENIAL. Un olor super fresco, suave y exótico, a puro verano. Ahora en agosto está siendo un gozo lavarse el pelo con estos dos productos, aunque por supuesto, los usaría durante el resto del año.

Los envases son preciosos y 100% veraniegos. El champú contiene 250 ml y el acondicionador 200. 

Los compré en una oferta de lanzamiento, en un pack en el que venían los dos por tan solo 3.99 euros. Fuera de ese pack tienen los mismos precios que el resto de productos Original Remedies: unos 2.70 euros el champú, y lo mismo el acondicionador. 

Al igual que con la gama Oliva Mítica y con las de avena y arroz y argán y camelia, repetiré seguro. Junto a esas tres, la de agua de coco y aloe ha pasado a ser la gama que más me gusta de Original Remedies.

NOTA: 10 / 10

miércoles, 23 de agosto de 2017

Tratamiento reductor intensivo noche - Somatoline Cosmetic


Hace cuatro o cinco meses me regalaron este producto -la chica ya no lo utilizaba-. Se trata del famosísimo tratamiento reductor intensivo noche de la marca Somatoline.

Asegura afinar la silueta y "reducir la grasa localizada" (hoolaaa: el cuerpo jamás adelgaza por partes sino de forma global), "en dos semanas" y sin más esfuerzo que su aplicación constante (a quienes hayan estado comiendo fatal, sin moverse del sofá y ganando peso durante meses o años, en dos semanas una crema les va a obrar el milagro). Y todo eso, "mientras duermes" (cierren todos los polideportivos, parques y gimnasios y dejen de vender material deportivo y alimentos sanos: con esta crema despiertas hecha una sílfide y ya no hace falta hacer ningún esfuerzo durante el día).

Ironías off, seré clara: me resulta esperpéntico que haya mujeres que de verdad confían en que una crema puede eliminar arrugas, borrar la celulitis o adelgazar. Pero nada: a seguir enriqueciendo a las empresas cosméticas mientras ellas se ríen de vosotras en vuestra cara. 

No tengo nada que reducir, como cualquier mujer que se cuida los 365 días del año y no solamente el mes antes de ponerse el bikini. Aun así decidí usar este producto, solo por reírme y constatar mi opinión sobre las cremas "mágicas".

Mi diosa Eva Marie "seguro" que tiene ese megacuerpazo por untarse una crema. La alimentación cuidada y todo el deporte que hace, "no" influirán.


Tras aplicármela diariamente hasta terminar el pedazo de bote, efectivamente mis teorías se confirmaron: mi cuerpo seguía exactamente igual ante el espejo, y a la hora de vestirme no notaba la ropa más suelta. Ni reducción visual en las zonas donde aplicaba la crema, ni menos peso en la báscula... nada de nada.

El colofón fue que el producto, una crema verdosa, me olía fatal. Mira que soy la persona menos tiquis-miquis con olores cosméticos, pero éste en concreto, puafff. Y tras aplicarlo, muchas veces por no decir siempre me dejaba un montón de pellejitos en la piel, como si se "pelara". Vamos: que no es eficaz y encima olía mal y me dejaba la piel como si tuviera roña. Menuda joya.

Que este "tratamiento" sea uno de los cosméticos más vendidos en España costando casi 50 eurazos, me da dolor de alma. No son tontos: el envase tiene aspecto como de producto de hospital, inspira confianza y seriedad. Añade marca de farmacia + precio por las nubes que le presupone "calidad" , y ahí lo tienes: ¡a picar, ingenuas!.

Yo desde luego tengo clarísimo que si alguna mujer dice que ha experimentado reducción con esta crema (o con cualquiera), una de dos: o ha tenido una sugestión de aúpa, o controló la alimentación y/o hizo ejercicio y eso fue lo que realmente le produjo el cambio.

La que quiera seguir creyendo estos timos y gastar dinerales a lo tonto cuando para conseguir un buen cuerpo no hace falta gastar ni un céntimo, ella misma. Claro que siempre será más fácil confiar en una crema "milagrosa" que llevar buenos hábitos durante todo el año.

Disculpas si resulto demasiado directa, pero es que estoy hasta el moño de que nos (os) engañen como a micos.

No debería ni puntuar a este despropósito dado que no era un producto indicado para mí, por no necesitar reducir. Pero aunque me salió gratis, ya solo por el hecho de costar lo que cuesta y haber comprobado que no hace nada, le tengo que poner suspenso absoluto.

NOTA: 0 / 10

viernes, 18 de agosto de 2017

Esmalte Color Riche "Divine Indigo" - L´Oreal Paris


En la actualidad, éste es mi esmalte favorito. Desde que lo compré ya solo me falta casarme con él. Es el primer esmalte que uso de L´Oreal y el estreno ha sido insuperable: me encantan los de su hermana pequeña (Maybelline), y éste también son palabras mayores.

La calidad resulta excepcional: queda super brillante, liso y uniforme 100% sin marquitas ni relieves de ningún tipo, el color es intensísimo hasta la exageración al igual que su cobertura -con una pasada queda como otros esmaltes con los que tienes dar tres capas mínimo-, y dura siglos intacto en las uñas. Es PERFECTO.

Y lo mejor: mi color. 609 Divine Indigo me tiene ENAMORADÍSIMA pues es un precioso y espectacular violeta oscuro super intenso y con cierto matiz azulado. Es un tono muy especial, misterioso, nocturno, sensual, mágico. Y en las manos queda sensacional y llamativo al máximo. A mí, que soy "poco" fan de los violetas en las uñas, me vuelve demasiado loca este esmalte.

Entre la calidad de la pintura y sobre todo el espectacular tono, cuando lo termine anda que no lo echaré de menos...

Contiene 5 ml y su precio ronda los 5-6 euros. Y quienes no tengáis tienda Dealz en vuestras ciudades de nuevo me vais a odiar: yo lo adquirí ahí por 1.50 euros.

NOTA: 10 / 10

Edito para mencionar que ya lo he terminado: me ha durado un año y pocos meses usándolo muchísimo, lo cual está genial y más teniendo en cuenta lo que me costó. Por desgracia ya no lo he vuelto a ver, pero buenas noticias: Essence tiene un esmalte de color muy muy similar: el 103 Midnight Sky.

miércoles, 16 de agosto de 2017

Mascarilla de arándanos Efecto Hielo 3 minutos - Yves Rocher


Efecto Hielo 3 Minutos es una mascarilla con extracto de arándanos indicada para hidratar y revitalizar el cutis. Posee una textura como de gel, muy agradable (al igual que su olor). Se aplica una o dos veces por semana sobre el rostro limpio y se deja actuar durante tres minutos para a continuación lavar con agua. El resultado es una piel luminosa y reluciente, hidratada y refrescada.

Lo de "efecto hielo" es un poco exagerado, pues ciertamente refresca pero tampoco es algo para tirar cohetes. En la descripción recomiendan antes de aplicarla dejarla unos minutos en la nevera para aumentar su sensación de frescor. Pero por sí misma, no esperemos un efecto refrescante de dimensiones titánicas.

Me parece una mascarilla sencilla y correcta, en el sentido de que no esperemos ningún efecto grandioso. Se limita a hidratar y refrescar (ligeramente). Deja la piel bonita pero no hace nada del otro mundo.

Contiene 50 ml que duran bastantes meses, dado que solo la utilizo una vez por semana o cada dos semanas.

Su precio de catálogo es de 6.50 euros (timo), pero con los eternos descuentos en Yves Rocher se queda en 3.25 / 3.90 euros. Al precio oficial nunca la compraría pero al otro he repetido en más de una ocasión. Aunque a decir verdad, terminaré mi envase actual y ya no creo que vuelva a comprarla.

NOTA: 6 / 10

Recordar que pese a la existencia de mascarillas comerciales, para la piel del rostro no hay nada como las caseras (y encima son gratis). Las de yogur natural, leche, miel, pepino, etc etc. Un milagro y también 100% natural para un cutis de cine, es el todopoderoso aceite de coco.

lunes, 14 de agosto de 2017

Máscara de pestañas Velvet Noir - Marc Jacobs


Esta es mi actual máscara de pestañas. Es una mini-talla que regalaron hace pocos meses con la revista Harper´s Bazaar.

Como no me maquillo a diario estas mini-tallas me duran muchísimo: 6 meses perfectamente, incluso más. Así que para mí es como tener la máscara en tamaño normal, solo que habiendo pagado mucho menos dinero.

La prestigiosa firma de moda de alta costura Marc Jacobs también tiene lineal de maquillaje. No sé cómo serán el resto de sus cosméticos, pero esta máscara de pestañas es Dios.

Según el propio Jacobs, uno de sus primeros recuerdos de infancia es cuando observaba a su madre cortar con delicadeza fibras de una cinta de terciopelo para aplicárselas sobre las pestañas y así darles volumen espectacular. Inspirándose en este bonito recuerdo, Marc Jacobs celebra la mirada «pestañas postizas»: un auténtico elogio a las pestañas voluminosas en negro intenso, capturado en un diseño vanguardista. Luce en un solo gesto pestañas de un volumen incomparable. Su fórmula cremosa de textura aterciopelada es el resultado de la asociación única de ceras untuosas y geles que confieren de manera instantánea cuerpo a las pestañas, sin efecto grumos. Su cepillo de volumen curvo proporciona una fórmula generosa en el centro de las pestañas para una densificación intensa, definiendo las puntas. Volumen inmediato. Pestañas indecentes. Mirada de terciopelo.

Puede parecer otro caso de publicidad engañabobos, pero Velvet Noir lo cumple todo: deja PESTAÑONES de puro infartoExagerados, gigantescos, ultra-negrísimos. Si como en mi caso ya tenemos de por sí buenas pestañas, con esta máscara podemos flipar.

Anteriormente tuve la Roller Lash de Benefit y probé la Diorshow de Dior: otras que dejan pestañazas. Pensaba comprar alguna en un futuro, y ahora dudo entre esas y la de Marc Jacobs. De todos modos ya veremos pues sería un capricho tonto de compra, dado que a mí rara es la máscara que no me deja pestañones y consigo los mismos resultados con una de 30 euros que con las de marcas tipo Maybelline.

Velvet Noir cuesta 28 euros en perfumerías. La mini-talla salió por 4 euros, que era el precio de la revista que la regalaba.

NOTA: 10 / 10

Edito para mencionar que me ha durado 7-8 meses, lo cual está fenomenal para ser una mini-talla.

viernes, 11 de agosto de 2017

Cuidados del cabello teñido de negro


No hay más que echar un vistazo al blog para ver que soy fanática del pelo obsidiana (hasta le he hecho sección propia).

Alguna vez lo he aclarado; mejor dicho destrozado, dado que al ser tinte negro no me queda otra que decolorar si lo quiero aclarar, y no veas lo "bonito" que se me queda el pelo cuando decoloro. Pero quitando una o dos veces al año que lo aclaro -y a partir de ahora espero que nunca más-, siempre lo llevo negro. Es el color que mejor me queda con diferencia abismal. Por eso soy subnormal cuando me lo quito, pues aparte de exterminarme el cabello, con otros tonos nunca estoy ni la mitad de guapa que con el negro intenso.

Tal y como expliqué aquí, del negro negrísimo me encanta la fuerza de su color, ese mega-brillazo inigualable, que va perfecto a mis rasgos y tono de cabello-piel-ojos, que los maquillajes chulos destacan una barbaridad, que es el color más fácil de conseguir y mantener y no esclaviza ni me estropea el pelo, que le da un aspecto impecable y sanísimo, que no necesito aclarar mis cejas y pega de 10 con ellas (soy castaña oscura pero mis cejas son negras), que da un morbazo tremendo a la cara, hace muy pibón y realza e intensifica los rasgos guapos a lo bestia, que es precioso, exótico, llamativo, salvaje, misterioso, elegante y super sexy al mismo tiempo, y en mi caso ni me endurece ni me echa años: todo lo contrario. Es mi color perfecto de cabello.

Cuando le da el sol a mi adorado negro azulado se ve increíble de brillante, literalmente plateado. Me encanta.

Una de las muchas ventajas de colorear nuestro cabello de negro es que es super fácil de mantener y no exige cuidados esclavizantes como sí sucede con tonos como el rubio o el rojo. Pese a ello, si queremos llevar el color y el pelo bonitos no hay que dormirse en los laureles. A mí un pelo negro natural o teñido sin nada de brillo, con el tono poco intenso y con aspecto seco, quemado o descuidado me parece el horror; casi al mismo nivel que el típico amarillo pollo en el que puedes freír huevos.

El enemigo del tinte negro azulado o ébano es el aclarado: pérdida de intensidad del negro a causa de los lavados, unida a la aparición del odioso reflejo rojo si debajo llevamos restos de tintes más claros, como es por desgracia mi caso. Esto repercute en que a partir de tres semanas más o menos desde que me teñí, me suelan aparecer reflejos rojizos y el negro se vaya aclarando. También depende del tinte: con algunos me empieza a ocurrir a las tres semanas, y con otros supero el mes con el negro intacto.

Qué ganas tengo de que me vaya creciendo el pelo y así eliminar los restos que tengo de decoloraciones, y que así por fin me deje de salir el reflejo rojo. Eso sí: cuando ya llevas muchos meses sin aclarar, el pelo se ha recuperado por completo de la decoloración y tiñes de negro cada mes, al final ya apenas se aclara (y eso cuando lo hace).

Me hace gracia, pues la mayoría de mujeres están obsesionadas con justo lo contrario: aclarar su cabello. Y yo, al revés. En cuanto me veo el negro poco intenso me dan los siete males. Venero el negro recién teñido, cuando se ve tan negrísimo que parece pelo de muñeca.


Para retrasar lo máximo posible el aclaramiento así como realzar el negro, procuro:
  • Lo principal: lavarlo cuanto menos mejor. No digo ser una cochina pero sí intentar espaciar el lavado y no hacerlo todos los días, pues es lo que se come el tinte negro a base de bienDe normal lo lavo tres veces semanales: dos entre semana y una el finde. Alguna vez consigo lavarlo dos veces en toda una semana, pero no es lo habitual. Normalmente el pelo me aguanta limpio hasta tres días: depende del champú y mascarilla que esté usando, y de si he realizado deporte intenso.
  • Lavarlo siempre con agua fría. Potencia una burrada el brillo del negro y no estropea el pelo ni se lleva el color del tinte, como sí provoca lavarlo con agua caliente. Al principio cuesta pero luego te acostumbras: yo llevo muchos años haciéndolo y ahora me sería imposible lavar mi pelo con agua tibia o caliente. Y lo de resfriarse en invierno por lavarlo con agua fría nunca me ha pasado. Por supuesto me refiero a fría normal, no congelada.
  • Sumamente recomendable -aunque yo no lo hago-: usar productos especiales para cabello teñido. En general siempre utilizo champús y mascarillas orientados a pelo seco y dañado (aunque el mío no es así, pero por prevenir). El motivo es que los productos para pelo teñido se me suelen quedar cortos en nutrición y cuidado, y como me tiño todos los meses, tampoco llego a acusar una pérdida de color importante como para necesitar productos que lo prolonguen. Lo ideal sería usar productos para cabello teñido que al mismo tiempo nutran mucho, pero yo no he encontrado ninguno a excepción de éstos, que por desgracia ya no veo en las tiendas. Pero vamos, que siempre será más aconsejable usar los específicos.
  • Nutrición y mimos a tope: el pelo tan negro como mejor luce es estando super hidratado y brillante, amén de que cuanto más sano y cuidado esté el cabello más tiempo durará el tinte. Y eso se consigue no maltratándolo y dándole nutrición: champús y mascarillas nutritivos, sérums, aceites y mascarillas comerciales y caseros. A menudo antes de lavarme el pelo le aplico horas antes un aceite, o mascarillas caseras como la de aceite de oliva y huevo o la de yogur natural. Aceites predilectos: el de coco y el de oliva, aunque hay muchos más. Ahogándolo en aceites y mascarillas mi pelo nunca está seco pese a que lo tiño todos los meses -influye que el tinte negro no machaca al no tener aclarante-. Y cuanto menos usemos aparatos de calor y productos fijadores, mejor (aparte de quemar el cabello, las planchas se "comen" el color del tinte). Jamás uso secador ni plancha, ningún aparato de calor toca mi pelo. Y laca y gel fijador puedo pasar meses sin usarlos. Si tenemos un cabello complicado habrá que hacerle lo que sea necesario, pero si como en mi caso tenemos la inmensa suerte de que lavado y secado al aire ya se queda bonito, cuantas menos cosas le hagamos, mejor.
  • A ser posible, usar productos especiales para cabello negro. Intensifican el tono azabache y evitan la pérdida de intensidad entre lavado y lavado. Yo utilicé los fabulosos champú y mascarilla de Naturaleza y Vida para cabellos negros (comentados en el blog), pero muy lamentablemente, hace tiempo que no los he vuelvo a ver en tiendas. Una pena, porque me tenían enamorada.
  • Productos para intensificar el brillo: los tintes negro ébano y negro azulado ya de por sí tienen un brillo espectacular, el cual podemos aumentar todavía más si utilizamos productos para el brillo capilar como sprays de brillo, sérums, etc.
  • Teñirlo con cierta frecuencia. Junto a lo de espaciar los lavados, sin duda es lo más eficaz para mantener un negro fortísimo y sin rastro de aclarado y reflejo rojo. Yo me tiño de negro azulado todos los meses sin excepción; como mucho dejo pasar mes y medio dependiendo de si el último tinte me ha perdido más o menos intensidad. No hay que tener miedo a teñir mensualmente: si tantísimas mujeres se tiñen de rubio -el color de tinte agresivo por excelencia- cada mes (y menos), no hay que temer a teñir de negro, siendo precisamente el color de tinte que no machaca. Yo lo noto un montón: cuando me teñía de tonos claros mi pelo estaba totalmente asesinado, mientras que ya puedo darme negro todos los meses, que no se me daña nada. Además, los tintes actuales no son como los de hace décadas y cada vez dañan menos, y reitero que el negro no estropea. Y están los baños de color.
  • Masajes capilares: potencian el brillo y también el riego sanguíneo consiguiendo que los tratamientos, aceites y mascarillas penetren mejor en el cabello, incidiendo en un negro más potente y bonito. 
  • Exponerlo lo menos posible al SOL. Esto es lo más importante junto a lo de los lavados y retocar el tinte. El sol aclara el cabello, y en mi caso, para quien lo quiera. En playa y piscina siempre siempre cubro mi pelo con telas, sombreros o gorras, y si voy andando por la calle o estoy sentada al aire libre siempre me pongo a la sombra. Huyo del sol, por el pelo, pero sobre todo por el tema piel / arrugas. Y se nota. Eso sí: el tinte negro azulado no veas cómo luce en verano con el solazo dándole de pleno, el brillo  y reflejo azul son cegadores.
  • Protegerlo del cloro de la piscina y del agua de mar. Si como yo, somos más de bañarnos que de estar tumbadas al sol, hay que proteger el cabello de esas aguas ya que se comen el tinte que da gusto, sobre todo la de piscina. Lo que hago siempre antes de meterme en el agua es untarme en el pelo mascarilla o aceite, a modo de barrera. No queda muy estético llevar esa plasta blanca (si es aceite no, porque parece que llevas el pelo mojado), pero corroborado: haciendo eso el tinte no me pierde color y sobre todo, el pelo no se daña ni reseca nada de nada. Eso de "pelo seco en verano" para mí es desconocido haciendo siempre esas dos cosas: cubrirlo si estoy en la toalla, y untarlo con mascarilla o aceite cuando me meto en el agua. Y ponerse a la sombra siempre que se pueda. Y por supuesto: cuando lleguemos a casa, a lavar el pelo con productos muy nutritivos.
  • Cuanto mejor comamos y vida más sana llevemos más bonito tendremos el cabello, lo cual obviamente influye a la hora de lucir un negro intenso y brillante.
Aunque parezca mucha cosa, en realidad es super fácil cuidar el cabello teñido de negro. Es una de las mil ventajas que para mí tiene este color, que no es nada esclavo. Con estos cuidados básicos, el negro azulado o ébano siempre luce espectacular.

miércoles, 9 de agosto de 2017

Colorete en crema Royal Blush - Rimmel London


Tengo desde hace poco este producto y me tiene encantada. Encima fue un super chollazo de compra.

Me gustan mucho los coloretes en crema; su desventaja es que puestos no duran tanto como los de polvo (aunque depende de la marca y producto, porque yo he usado coloretes en crema que me aguantan todo el día y coloretes en polvo que a las 3 horas se habían esfumado). Y ese acabado jugoso y tan natural de los rubores cremosos me chifla. Por no mencionar que no necesitan brocha y que te los aplicas en 2 segundos en cualquier momento y lugar. Son comodísimos.

Royal Blush de Rimmel London es un colorete con textura crema que en contacto con la piel adquiere un acabado ligeramente empolvado. Se aplica con los dedos, resalta los pómulos y aporta un resultado perfecto.


Lo de "empolvado" no sé de dónde lo han sacado, porque a mí me parece un colorete en crema de los de siempre: acabado satinado jugoso, luminoso, fresco y super natural. Da un efecto de buena cara sensacional y ahora en verano queda fantástico. Y no es nada graso. La textura es fluida y ligera, pinta fenomenal y la intensidad de color es 100% modulable dependiendo de si lo queremos más intenso o discreto.

Hay cuatro colores: rosa bebé, rosa medio, coral y melocotón. A mí me habría encantado un rosa, que es mi tono preferido para coloretes, pero donde lo compré solo tenían el coral ("Coral Queen"). Aunque no me arrepiento, pues queda PRECIOSO. Y me vino hasta bien que no lo tuvieran en rosa, dado que coloretes rosas tengo para montar una tienda. Nunca he sido muy de tonalidades corales en maquillaje y eso que son ideales para mí siendo morena, pero gracias a este producto me he "redimido". Además del cálido y bonito color entre rosado y melocotón, tiene como un reflejo o brillito dorado que le queda genial.

Es el de la izquierda:

Y aquí, el color de la derecha del todo:


Para ser un colorete en crema, la duración es genial. A mí me aguanta como recién aplicado hasta que vuelvo a casa.

Contiene 3.5 gramos, por lo que cundirá lo suyo.

Es un colorete que lo tiene TODO: color preciosísimo y super favorecedor que parece que surge de la propia piel, acabado luminoso y natural, buena duración, aplicación ultra-fácil con los dedos sin necesidad de usar pinceles, envase monísimo y tamaño muy pequeño que cabe en una mano, y precio 10.

Cuesta 5-6 euros en perfumerías. Tirado de precio y más teniendo en cuenta lo bueno que es... pero es que a mí me costó ¡¡¡1.50 euros!!! en una tienda Dealz, la cadena británica de productos de importación. Y el otro día compré dos barras de labios de L´Oreal por ese mismo precio cada una. Amo ese establecimiento: encuentras unas gangas que flipas.

NOTA: 10 / 10

lunes, 7 de agosto de 2017

Leche limpiadora - Biocura


Con los cosméticos de la marca alemana Biocura (supermercados Aldi) nunca sé a qué atenerme: su crema corporal nutritiva del bote azul me parece Dios, al igual que sus discos desmaquillantes. Sus cremas para el contorno de ojos, he usado dos diferentes y también me gustan. Mientras que su tónico facial me pareció mediocre, y esta leche limpiadora tampoco me ha emocionado. Con la también alemana Cien (supermercados LIDL) me pasa igual: he usado productos que son para rezarles, pero también ha habido alguno que pfffff.

Ayer terminé este producto. Es la leche limpiadora de Biocura.

Suave e indicada para todo tipo de pieles, contiene extractos de ginkgo, aloe vera y vitamina B3 que cuidan la piel. Limpia delicadamente rostro, cuello y escote, eliminando el maquillaje y las impurezas.

Me ha parecido una leche limpiadora muy simplona; hace su función pero las hay mucho mejores. Esencialmente, la veo floja limpiando. Yo de normal, con cualquier limpiadora consigo retirar todo el maquillaje o suciedad de una sola pasada, mientras que con ésta nunca o casi nunca conseguía limpieza total de una vez. A veces tenía que dar una segunda pasada y usar un segundo disco desmaquillante para conseguir quitar todo. Cuando por ejemplo, con esta maravilla de LIDL me queda la cara totalmente limpia de una vez. La de Aldi si no nos hemos maquillado ese día pues genial, pero como nos hayamos hecho un maquillaje y encima de los elaborados, le cuesta.

Al tener algunas veces que repetir la aplicación, me duró menos que otras limpiadoras. La de LIDL tiene menos cantidad, 250 ml, y pese a ello, todos los frascos me duraron 6 meses. La de Aldi con 300 ml me ha durado 4 meses.

Tampoco se nota nada especial; ni hidratación, ni luminosidad, nada de nada. Cuando esa de LIDL te deja el cutis de precioso que flipas.

Solo cuesta 1.39 euros pero no repetiré, estando por ejemplo la de LIDL que cuesta lo mismo (20 céntimos menos) y le da un millón de vueltas.

NOTA: 4.5 / 10